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Aquellas universidades extranjeras que ofrezcan grados universitarios en Kenia sin acreditación serán multadas con una cantidad de al menos 10 millones de chelines kenianos y sus promotores serán enviados a tres años de prisión bajo el amparo de una nueva ley dirigida a salvaguardar los estándares educacionales. La Comisión para la Educación Universitaria (CUE por sus siglas en inglés) reemplazará a la Comisión de la Educación Superior en la supervisión del nivel educativo de la universidad.

La inspectora adjunta de la Oficina de Educación del distrito de Malindi les ha pedido a los directores escolares que se aseguren de que sus estudiantes completan el plan de estudios en el plazo establecido. Declaró que si los profesores no cubren todo el plan de estudios esto será contraproducente para el rendimiento de los alumnos en los exámenes a nivel nacional. Alegó que el hecho de completar el plan de estudios a tiempo fomentará el buen rendimiento y pondrá freno a cualquier tipo de irregularidades en los exámenes.

Kenia ha hecho pública una nueva normativa y ha advertido a más de 200 instituciones acerca de las medidas enérgicas que se van a tomar contra 21 gestores que se enfrentan a cargos penales por operar escuelas universitarias ilegales, habiendo ya cerrado 63 de ellas a lo largo del último año. Dicha acción sigue los pasos de los planes del gobierno para financiar a las instituciones en un sector tan clave como es el de la educación, para ayudarles a hacer frente a la alta demanda de universitarios bien capacitados.

La semana pasada, el gobierno de Kenia despidió a su Ministro de Educación, quien había sido suspendido de su cargo dentro del gabinete por supuestas alegaciones de soborno.

Un funcionario del Ministerio de Educación fue acusado ayer de haber cometido un fraude de 9 millones de chelines. Se alega que el funcionario en cuestión se apropió de manera fraudulenta de más de 2 millones de chelines en abril de 2009 y entregó un impreso falso por valor de más de 7 millones de chelines en mayo del mismo año.

Nairobi — el ministro de Educación Superior, William Ruto, declaró que no dimitirá bajo la acusación de fraude de 96 millones de chelines keniatas que pende sobre él ante los tribunales.

Kenia ya no es considerado un país destinatario de ayuda por Canadá, declaró el nuevo Alto Comisionado del país. David Collins dijo en una entrevista que esto era debido a sobornos masivos. Mencionó el escándalo que rodeó el desfalco de 103 millones de chelines keniatas del programa de Educación  Primaria Gratuita.

Las universidades de dos países del África Oriental, Kenia y Tanzania, son blanco de las críticas a causa de haber concedido de manera pródiga títulos honorarios - en algunos casos supuestamente por dinero y en otros a cambio de influencia