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Mientras la corrupción obstaculiza todos los esfuerzos de desarrollo, se trata de una presencia debilitante en el sector de la educación. El absentismo de los profesores es una de las formas educación superior no debe contemplarse solo en términos del mal uso de los fondos de investigación, la presentación y construcción de datos fraudulentos o la aplicación de prácticas de admisión no equitativas.

Un nuevo reporte dice que la corrupción mundial en sistemas educativos, recarga al pobre desproporcionadamente. Transparencia Internacional dijo en una encuesta publicada el 1 de octubre, que casi 1 en 5 personas a nivel mundial pagaron sobornos de servicios educativos el año pasado.

Los "malos" de hoy en día parecen estar en todas partes. Y parecen sentir también cierta debilidad por las escuelas y las universidades. Según los datos de una encuesta llevada a cabo en 2011 por Transparencia Internacional, el 35 % de la población mundial en 100 países no tiene ninguna confianza en la integridad de sus instituciones educativas

Desde el final de la Guerra Fría, el dramático aumento de la educación a nivel global ha incrementado no solo la comercialización sino también la corrupción. La corrupción en la educación superior no debe contemplarse solo en términos del mal uso de los fondos de investigación, la presentación y construcción de datos fraudulentos o la aplicación de prácticas de admisión no equitativas.

Según la última encuesta del grupo de investigación Babson Survey Research Group sobre programas de educación online en centros y universidades, 6,1 millones de estudiantes asistieron virtualmente a al menos una clase en línea en el otoño de 2010, lo que supone un incremento del 10,1 por ciento respecto al año anterior. Pero a medida que el número de alumnos en cursos online aumenta, también lo hace la posibilidad de hacer trampas.

Durante la Conferencia Anual de la Asociación Europea para la Educación Internacional, un experto declaró que el fraude en la educación superior internacional es un negocio de entre 1.500 millones y 2.500 millones de dólares estadounidenses. Señaló que el fraude es un problema omnipresente y lo definió en términos generales, situando varias formas en un espectro de gravedad – de puro embellecimiento, en el extremo más bajo, a fraude de identidad a escala completa en el otro extremo.

Los estudiantes chinos llevan décadas viajando a Estados Unidos para estudiar, pero en los últimos años su número ha aumentado de forma muy notable. Muchos de ellos solo tienen un conocimiento básico de las universidades extranjeras y afrontan grandes dificultades para encontrar sentido a aplicaciones de gran complejidad. Como resultado, en el país ha comenzado a proliferar una industria de agentes educativos dedicados a orientarles y, en algunos casos, a hacer lo que sea absolutamente necesario para asegurarse de que sean aceptados.

El fantasma de la corrupción se cierne sobre la campaña mundial que aboga por la internacionalización en la educación superior. Nuevos actores privados se han colado en el sector con el único objetivo de ganar dinero. De algunos de ellos se puede decir que sus intenciones son menos que honorables. La corrupción no se limita solo a países famosos por protagonizar prácticas académicas supuestamente poco éticas, sino que el problema se registra a nivel mundial.

Una vez llevado a cabo un estudio exhaustivo, la magnitud y alcance del fraude cada vez queda más patente. Por ejemplo, las investigaciones realizadas sugieren que la mayoría de las solicitudes presentadas por aquellos países emisores de grandes cantidades de alumnos o bien están infladas o directamente son fraudulentas. Como resultado, decenas de miles de alumnos internacionales, habiendo superado los obstáculos de visado y admisión, consiguen matricularse en cualquier lugar del mundo utilizando expedientes académicos, declaraciones de apoyo financiero, cartas de recomendación o resultados de evaluaciones falseados.

De acuerdo con el informe más reciente del Accredibase, la empresa de investigación de antecedentes del Reino Unido VeriFile Limited, el año pasado se produjo un asombroso aumento del 48 % en el número de fábricas de grados o diplomas conocidos que operan en todo el mundo. Se identificaron más de 2.500 instituciones falsas en todas las regiones, pero principalmente en América del Norte y Europa.